Esquimal: Oslo - Domingo

Ultimo día en Oslo, el día fue precioso, tan soleado que hacía a la nieve deslumbrar, lo comenzamos en un hermoso café que se encontraba casi abajo del hotel, llamado Åpent Bakeri para después dirigirnos ya con maletas a el Museo Nacional de Arte Contemporáneo.

Vista a través de la pared de cristal desde Åpent Bakeri

Museo Nacional de Arte Contemporáneo

Instalación dentro del Museo Nacional de Arte Contemporáneo hecha de metal que consistía en una escalera que te llevaba hasta un túnel tan estrecho que no era posible caminar de frente y al final había un área circular con un foco en el fondo, fue una extraña y curiosa sensación de falta de espacio mientras escuchaba mis pisadas y su eco por el material metálico. No se permitía sacar fotos pero nadie me veía y no dañaba nada.

Bóveda dentro del museo utilizada como área de lockers.

En el Museo Astrup Fearnley de Arte Moderno vimos una excelente exposición: Rotating Views, la idea es rotar los proyectos que conforman la exposición, o sea, presentar toda la exposición pero no al mismo tiempo.

Museo Astrup Fearnley de Arte Moderno

Clamor, obra de Allora & Calzadilla, es un estudio de la música y el sonido como posibles armas y el rol de de la música en conflictos políticos y guerras. Es un bunker musical, un bunker en una montaña con instrumentos musicales en lugar de armas, cuando la música es en vivo, músicos se meten al bunker para tocar, entre otras cosas, marchas militares. Estas son fotos del folleto de la exposición ya que no era permitido sacar fotos.

Por último visitamos la Casa de la Opera antes de tomar el autobus que nos llevó a Torp y tomar el avión de regreso a Londres. La Casa de la Opera se ha convertido en un símbolo para Oslo, el aspecto del lugar es sorprendente, sobre todo cuando todo está lleno de nieve en un día soleado.